“Spazieren gehen”, el turismo también parte desde casa

Si bien por definición técnica, el “spazieren gehen” no aplica como Turismo. Hoy me permito considerarlo como tal, y para escribir sobre ello en un sentido más bien filosófico.

Y es que creo fielmente que con pequeños pasos sí podemos crear una forma más humana de viajar, de hacer turismo. Como por ejemplo, que el turismo también sea una forma más de cuidarnos.

Y particularmente hoy, que me siento tan agradecida por tener la oportunidad de aprender el idioma alemán, llegué al recuerdo de cuando llevaba sólo un par de semanas viviendo en Alemania y un amigo de mi marido me habló del concepto “spazieren gehen”, diciéndome “esta es una práctica o costumbre que tenemos aquí”, porque eso era lo que haríamos en unos minutos: salir a caminar mientras conversábamos y disfrutábamos de la tarde.

Así que, ¿de qué se trata el “spazieren gehen”?

Es una actividad muchas veces diaria, que consiste básicamente en “salir a pasear” por unos 30 minutos o una hora aprox. Todo también depende de la frecuencia con que se haga, en días hábiles o fines de semana, si es en la ciudad donde se vive o hacia las afueras de ella. Entonces, salir a caminar con el objetivo de; despejar la mente, mover las piernas, mover el cuerpo, respirar un nuevo aire, cambiar de aire, salir a descubrir, mirar con nuevos ojos, respirar, darse una pausa, resetearse, relajarse, desconectarse, o para conectarse con uno mismo, etcétera.

No me cabe duda, que como humanos y viajeros, adoptar prácticas para el cuidado personal en casa, también nos pueden ayudar a la hora de viajar sustentable. Y sí, algo muy simple y básico como salir a caminar, beber agua o aprender algo nuevo cada día, es donde habita la belleza de lo simple que nos lleva a vivir y viajar en bienestar.

Y es que, según lo que observo a diario, el “spazieren gehen” es una práctica muy instalada en la sociedad como una forma más de mantenerse “fit”, saludable o sano.

Un estar fit, de sentirse bien, con energía, de buen ánimo. Un estado que va más allá de solo lo físico, y dónde la salud mental es también fundamental.

Ahora, ¿y qué tiene todo ésto que ver con Turismo?

Mucho la verdad, ya que el futuro sustentable y humano del turismo tiene relación con los hábitos de los viajeros (y residentes también). Habitos de casa, que de manera espontánea se repiten en el viaje.

Un viajero saludable, responsable de su salud y bienestar, también buscará lo mismo en su actuar al viajar. Al cuidar de si mismo(a), respeta y cuida el destino que visita, así como valora el que residentes cuiden de su hogar.

Por otro lado, cuando el salir a pasear en casa está tan integrado, la valoración de lo simple toma su lugar. El valor de hacer una pausa, de disfrutar el camino y el andar, y no sólo el querer llegar al atractivo que está al final del camino.

Cuando valoramos detalles simples como salir a pasear 30 minutos, para tomar aire, para hacer una pausa, para reenergizarnos: nos liberamos de expectativas que pesan tanto en la mochila o maleta de viaje.

Y valoramos aún más el camino. Porque es hermoso visitar atractivos turísticos de categoría mundial, pero así también, el caminar por las calles de un pueblo, barrio o ciudad, para ver a su gente, sus puertas y ventanas, sus jardines y campos. Para ver también a su gente, el caminar de su gente.

Salir a caminar, para respirar su aire, para tomar fotos con los ojos.

Así mismo, liberamos al destino y su gente de la presión de ser lo que no son, o de crear atractivos artificiales, de dejar de competir por tener “el atractivo más visitado”. Porque el valorar lo simple, significa valorar lo auténtico, en su mejor estado claro, y así, con una plataforma turística que facilita la actividad.

Esto a su vez, da tiempo y espacio para que destinos turísticos se desarrollen con base en valores de respeto y amor, sustentabilidad y colaboración. Y que su atractivo se base en el bienestar del vivir de su gente. Que el caminar por sus calles, además de seguro, sea toda una experiencia que los propios residentes disfrutan a diario.

De ahí que hoy piense, el turismo también parte desde casa, cuando simplemente salgo a pasear.

Más allá de donde uno vive o hacia dónde uno viaja, el tener prácticas sustentables como viajeros es lo que marca la diferencia y enriquece nuestro caminar.

Spazieren gehen en casa es para mí, como prepararme para el próximo viaje.

Nataly Ortiz-Stehle

15 de Marzo, 2022

Annweiler am Trifels, Deutschland

%d bloggers like this: